martes, 16 de abril de 2019

CREAR UN PAISAJE BÉLICO



Las cicatrices de la guerra en nuestra provincia están presentes en la memoria y en la vida cotidiana. Y más ahora que se museiza cualquier espacio, que los recursos turísticos echan mano de elementos antes despreciados. Proyectos como Atrinchérate o Batallate han dotado de valor a los restos de la contienda, pero quizás no sea incompatible con el respeto hacia la vegetación que ha recuperado su lugar  y dotado de vida al paisaje. 
Un ejemplo lo podemos ver en las trincheras de Escorihuela donde se han eliminado las encinas  y "construido" un paisaje con un ejemplar amnistiado en la cumbre.





No hay comentarios:

Publicar un comentario